El trastorno de angustia (trastorno de pánico)
Es un subtipo de trastorno de ansiedad, que tiene tratamiento médico-psicológico. Las personas con trastorno de angustia tienen episodios súbitos de miedo intenso sin motivo. Estos episodios se llaman crisis de angustia (ataques de pánico). Las crisis de angustia se acompañan de síntomas físicos, además de los psíquicos.
Síntomas de la crisis de angustia (ataque de pánico)
Son episodios de miedo intenso, que aparecen repentinamente. Normalmente aparecen en situaciones conocidas donde no es esperable el miedo o en las que la intensidad del miedo es desproporcionada. Durante la crisis de angustia, y ante el miedo, el cuerpo reacciona con otros síntomas.
Aparecen síntomas físicos:
Palpitaciones (golpes del corazón), taquicardia (el corazón va más rápido), sudoración, sensación de falta de aire al respirar, dolor en el pecho, mareos, parestesias (hormigueo), temblor, sofocos, nauseas, dolor en el estómago,etc
También surgen otros síntomas psicológicos:
El miedo a perder el control, el miedo a volverse loco, el miedo a morir, la desrealización (sensación de encontrarse en una situación irreal), la despersonalización (sensación de separarse de propio cuerpo).
Durante el episodio sentir la necesidad de tener que escapar, pensar que algo terrible va a suceder. Este miedo, le hace evitar lugares o situaciones que cree que le pueden desencadenar un ataque.
¿Cuando aparece?
En general, los síntomas de las crisis de angustia surgen bruscamente y alcanzan su mayor intensidad a los 10 minutos.
Las crisis de angustia que pertenecen al trastorno de angustia son inesperadas por la persona que las padece, es decir, sin que medie ningún motivo. Además otras enfermedades o fármacos pueden provocar crisis de angustia. Por lo que se recomienda acudir al médico para la realización del diagnóstico correcto. Las mujeres tienen más frecuentemente trastorno por angustia, pudiendo llegar a afectar a 2/3 de mujeres y a 1/3 de hombres.
El trastorno de angustia se acompaña frecuentemente de la agorafobia. Las personas con agorafobia tienen miedo a permanecer en lugares públicos concretos, de donde piensan que es difícil escapar o en los creen que no podrán recibir ayuda en caso de tener una crisis de angustia. Incluso en ocasiones tienen miedo a estar solos en cualquier situación o lugar. De esta forma algunas personas dejan de utilizar el trasporte público, no entran en centros comerciales, no se alejan a más de cierta distancia de su domicilio, llegando al extremo de rechazar quedarse solo en su casa. Ante la evitación de distintas situaciones la vida de la persona se va restringiendo, produciendo en ocasiones gran discapacidad.
La ansiedad anticipatoria
Es la ansiedad que aparece ante el simple hecho de pensar en la posibilidad de tener una crisis de angustia. Puede llevar a la reclusión en el domicilio de la persona que la padece, ante el temor a padecer una crisis de angustia en lugares donde no puede recibir ayuda.
Se desconocen las causas exactas de este trastorno, aunque se observa que existe una predisposición familiar. Además se observa frecuentemente la presencia de acontecimientos vitales estresantes en el inicio del trastorno de pánico, como la muerte o separación reciente de un ser querido; lo que sugiere que pueden actuar como desencadenantes.
Las personas con trastorno de angustia son más propensas a tener depresión que el resto de la población. Otro posible trastorno con el que se puede complicar el trastorno de angustia es el abuso de sustancias.
Para afrontar la crisis de angustia te recomiendo leas mi artículo crisis de angustia ¿qué hacer?